Salimos por la carretera que une Bogotá con Girardot pasando por los municipios de Chía, Cota, Funza, Mosquera, La Mesa, Anapoima, Apulo y Tocaima , es un recorrido muy lindo en medio de haciendas campestres, acogedores restaurantes en una carretera amplia y con paisajes muy atractivos además de un agradable clima templado
Al llegar a Girardot llamada la ciudad de las Acacias, atravesamos el puente sobre el río Magdalena que es el más importante y extenso del país. A partir de acá el clima es caliente, toda esta zona es la preferida por muchos colombianos para descansar por su clima y buena infraestructura hotelera, centros vacacionales y fincas.
Llegamos al Espinal, no se puede seguir de largo sin antes parar en uno de los innumerables puestos a degustar sus delicias gastronómicas como son, la avena helada, los biscochitos de achira, las mantecadas, los quesillos y la lechona que tiene mucha fama.
El Guamo es otra población conocida por las artesanías de la Chamba, famosa por la elaboración de ollas y utensilios de barro de muy buena calidad elaborados con una antigua tradición indígena, a lo largo del camino están los puestos que ofrecen las artesanías tolimenses, las vajillas de arcilla negra elaboradas en la Chamba, las carteras y sombreros de fique.
La zorra es la carreta jalada por caballos, muy utilizada para carga en las tareas y jornadas del día a día, las vemos en todas los pueblos de Colombia.
Monumento en honor al café y al campesino cafetero.
En todos los pueblos la bodeguita sigue perdurando por el estilo de vida de sus habitantes.
En Honda el monumento es a la Tambora instrumento musical muy utilizado en la región.
En el Guamo una escena habitual, la hamaca forma parte del mobiliario.
Llegamos a Neiva capital del Huila avanzando entre los cultivos de arroz y algodón.
En el mes de junio se celebra el festival folclórico y Reinado Nacional del Bambuco
conocida también como la Puerta del Macizo Colombiano.
conocida también como la Puerta del Macizo Colombiano.
Monumento a la Gaitana, creado por el maestro Arenas Betancourt, representa
la rebelión indígena liderada por la gaitana.
La represa ó embalse de Betania es uno de los espejos de agua más importantes del país, son 7.000 hectáreas que producen 510.000 kilovatios de energía alimentada por las aguas del río Magdalena y el Yaguará, se practican deportes naúticos en ella. Paramos en el mirador para admirar el paisaje, mi primo Otto nos comentó que él participó de este proyecto y mi hno. ingeniero geólogo ha trabajado por estas tierras y se conoce toda la zona.
Pasamos luego por Campo Alegre y el desvío que conduce al Desierto de la Tatacoa. En la carretera divisamos el perfil de El Gigante formado por la cadena de montañas, antes de llegar a la población que lleva su nombre.
Llegamos a Gigante y en su parque principal encontramos la Ceiba de la libertad que simboliza la abolición de la esclavitud en la Nueva Granada. Otro atractivo son las fincas cafeteras que se aprecian en el camino pasando por Garzón.
La carretera desde Campo Alegre hasta Pitalito es espectacular porque el carro avanza en medio de un túnel verde formado por las ramas de los árboles que se entrecruzan. Al llegar buscamos hotel y pasamos la noche después de 12 horas de paseo como decimos “entre las tiendas”.
Nos levantamos temprano y pudimos apreciar un fenómeno que se da con las plantas, estas están envueltas como en una telaraña que con el frío mañanero se cubren de blanco, parece nieve y con el transcurrir de las horas desaparece.
Después de un rico desayuno con arepas, queso, huevos revueltos y chocolate enrumbamos hacia nuestro destino San Agustín, en donde conseguimos un guía para el parque.
Calle en San Agustín
Señor de San Agustín
Las motos son el medio de transporte más común, incluso en los pueblitos más chicos han remplazado a los caballos y las mulas.
PARQUE ARQUEOLÓGICO DE SAN AGUSTIN, lugar único en el mundo, fue declarado patrimonio mundial en 1995, en él se encuentran los vestigios más importantes de la cultura agustiniana, este pueblo dejó las tierras presionado por invasores en 1.300 ó 1.400 de nuestra era.
El parque es un espacio abierto que reúne 130 piezas arqueológicas talladas en piedra, que en su mayoría son un tributo a la muerte, el nacimiento, el cosmos y la relación del hombre con la naturaleza.
Al llegar allí sentí que mi experiencia trascendía lo físico para entrar en una dimensión espiritual, algo semejante sentí al llegar a Machupicchu, son sensaciones únicas e indescriptibles.
El recorrido puede durar 4 horas, los caminos están bien definidos entre una vegetación exhuberante, nuestro guía resultó un especialista en plantas y nos enseñó todas las variedades de las cuales se sacan los tintes naturales, también la corteza del árbol que se mezcla con la panela o chancaca cuando hierve y que le da un color más claro.
La Fuente Ceremonial del Lavapatas es la obra escultórica más grandiosa que demuestra que tenían conocimientos de hidraúlica e ingeniería. Son canales y piletas labradas en el lecho de piedra de la quebrada de 50 metros, con representaciones de serpientes, lagartos, iguanas, ranas, tortugas, mezcladas con caras y formas humanas.
Puente elaborado en guadua
Alquilamos una camioneta de doble cabina para hacer el resto del paseo porque el camino es destapado, es recomendable un campero porque es un viaje que hay que hacer por sus múltiples atractivos, está el alto de las piedras y el alto de los ídolos con más esculturas, también hay canotaje sobre el río Magdalena. Acá una chiva en el camino.
El primer sitio que visitamos fue el Estrecho del río Magdalena, como sabemos este río es el más largo de Colombia, recorre casi todos los departamentos, es muy caudaloso pero en este sitio alcanza 2.20 metros, este paraje está a 9 kms. de San Agustín, se deja el carro y a 100 metros por unas escalinatas de piedra se baja y se está a la altura de este imponente caudal.
Por la carretera que va hacia Isnos llegamos al Salto del Mortiño, llamado así
porque en su paisaje se distingue el árbol que lleva este nombre. Es una imponente caída de agua de 170 mts. de
altura.
Más al norte unos 14 kms. está el Salto de Bordones, cuyas aguas caen a más de 230 mts de altura
.
Regresamos a Pitalito después de un día muy productivo lleno
de experiencias reconfortantes, allí pasamos la noche. Al siguiente día iniciamos el viaje de
regreso por los mismos sitios, pero a la altura de Melgar cambiamos el rumbo
para conocer el nuevo túnel que evita que pasemos por la famosa “nariz del
diablo” y que acorta el camino, es un túnel enorme y largo, luego encontramos
la doble calzada que le faltan algunos pequeños tramos para concluir y entramos
a Bogotá por Soacha.
Gracias Ricardo por este precioso paseo que Pío y yo disfrutamos mucho, eres un guía de primera y un excelente conductor y a mi sobrina por su compañía encantadora.
